miércoles, 31 de diciembre de 2014

Algo bonito en cada echar de menos


Hoy, noche de sentarse a ''mesa puesta'' o en cambio, correr porque para variar y por muy a rebosar que este la nevera y sus alrededores, siempre, quedarán cosas por comprar. 

Para aquellos que colaboran y decoran esa mesa después de leer y buscar inspiración en multitud de páginas demasiado peripuestas de nuestro querido mundo online. Para los que después de la sobredosis de Master chef se aferran al delantal y deciden que su propósito de año nuevo será empezar a cocinar y ¿por qué no esta misma noche?. Para los que prefieren pasear y despedir el año que ya ha volado cerveza en mano, o bueno, en ambas que con una a veces no basta.

 Para tantos que les invaden los nervios, para los de ''si es una noche como cualquier otra'' o, para muchos más que se agobian y se exceden con las cantidades que añadir a esa receta milenaria y tan magnífica de la abuela que siempre opinará que ''así no se hace''.

 Para los que disfrutan de los que están, para los que viven lejos y aun así siempre están, para los que independientemente de donde estén te alegras de no compartir mesa con ellos, para los que en cambio, desearías que se acordaran de ti o bien, para los que recuerdan las sillas vacías de aquellos que ahora tienen la suerte de sentarse a una nueva mesa, una tan alta que los fuegos artificiales de media noche ansían rozar. 

Por eso, calificaría egoístamente, que es una noche que da tanto como uno quiera pedirle y que digan lo que digan, opines o publique tu ''año de Facebook'', ten presente que siempre hay algo bonito en cada echar de menos, y sobretodo, una manera personal de entenderlo.




¡A disfrutar del 2015!
S-

domingo, 7 de diciembre de 2014

''Tanto de tanto''

Tengo esa curiosidad caprichosa de conocer a lo largo de mi vida a alguien que soporte las despedidas, o mejor dicho, que consiga sobrellevarlas con naturalidad. Para todos los demás, les deseo que experimenten el sabor que tienen los reencuentros, y si, digo sabor porque va más allá de un sentimiento y no confío en ser capaz de describirlo. La suerte de los reencuentros diría. La "obligación" a compartir un pasillo de una casa que forma una familia, la capacidad de hacer sentir agusto, de formar algo que sin nombre todos conocen.

Será el mes de septiembre con novatadas, será octubre y las esquinas de pecaditos, o puede que noviembre y convertir un pasillo en el perfecto escenario de un concierto con entradas reservadas, que mas dará. Será una de tantísimas cosas que se cuentan y otras tantas que es mejor que nadie conozca, porque a quien le importe que no desespere, Facebook contaba con pase preferente a todo y Snapchat le hace la competencia.

Pido una explicación para como se puede querer tanto, como se puede "tanto de tanto" a tantas personas. Quizá se cumple eso de cuando dos quieren las cosas salen bien, en tal caso, yo extiendo la normal 16 veces y corroboro una de las frases más escuchada por estas calles o para todo aquel que pregunte a cual de tantos colegios mayores ir , "el colegio lo forman sus colegial@s" y en mi caso, mi pequeña habitación del Colegio Mayor Berrospe es el escenario favorito de todas y cada unas de las anécdotas que nos guardamos para nosotras. Gracias niñas 

S-